En los últimos años se ha hablado en la industria del Lujo y la Moda en cumplir una agenda 2020 centrada en ahorro de energía y sostenibilidad impuesta por la Unión Europea. A su vez se han ido desarrollado otros proyectos cómo la búsqueda de inclusión en género, raza y cultura, pero, ¿qué ha pasado con la edad?, quizás la edad sea el mayor reto al que combatir en el ámbito laboral.
Durante los pasados meses hemos hablado de gamers, instagramers e incluso tik tokers, todos ellos pertenecientes a la generación Z y Millenial, se ha hablado cómo las marcas están buscando un relevo generacional y contratan a estos para poder comunicar y monetizar sus productos, pero en ningún momento las marcas suelen contratar o ponen sus puntos de mira en otras generaciones, ya que estas han asumido que ya entienden sus hábitos de compra, cultura e incluso forma de vivir. El problema es como dijo Heraclito que “Todo fluye, Todo Cambia y Nada permanece”.
Según un estudio de la fundación Endesa y la fundación Mashumano, el 70% de los desempleados mayores de 50 años en España, han aprovechado el confinamiento para formarse. Es decir que si en el estudio del año pasado que Deloitte realizó se indicaba que para las empresas de este sector la contratación de personal entre 45 y 74 años era una gran desventaja, después de este confinamiento la industria quizás debería volver a poner sus miras en la contratación de profesionales seniors.
Si además analizamos en el informe de Deloitte, la curva demográfica de los últimos 20 años, se observará que la media de longevidad incrementa tres meses por año. Si a esto añadimos que cada vez se tienen menos hijos, pronto la generación de los “Baby Boomers” superará numéricamente a los Millenials, que todavía no están preparados por falta de experiencia para liderar posiciones seniors.
La forma de contratación en la que se basan las marcas de la industria se está quedando obsoleta. Las marcas ofrecen paquetes basados en carrera dentro de la empresa, sistemas de pagos y bonificaciones, todo esto va en contra de la búsqueda de conocimiento y experiencia que son los principales sistemas de predicción que un departamento de Recursos Humanos utiliza para realizar la tasa de producción y eficiencia.
El equipo de LuxStyle Consulting sí está de acuerdo que a partir de los 40, suelen dismunir en personas ciertos atributos o capacidades mentales cómo puede ser la agilidad matemática o memoria, pero a su vez, suelen incrementar otras muy necesarias para el ámbito laboral como la inteligencia emocional, compresión del entorno o simplemente la habilidad para pensar, aprender y reaccionar.
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Juan Borges